Creación
Uno de los acontecimientos precursores en la creación de la Fuerza
Aérea Venezolana, lo constituyó la hazaña del piloto estadounidense
Frank Boland, el cual el domingo 29 de septiembre de 1912 al mando de un
biplano de tela y madera, con motor de 60 caballos y peso de 300
kilogramos, realizó por primera vez en Venezuela, el despegue y vuelo de un avión,
todo esto ante una gran multitud de personas reunidas en la pista del
Hipódromo "El Paraíso”. El rudimentario aeroplano (un biplano) voló con
destino al este de la ciudad y aproximadamente a la altura de lo que hoy
se conoce como el sector San Bernardino, viró de regreso, sobrevolando
la zona del Calvario y dirigiéndose nuevamente a su punto de partida
(Hipódromo El Paraíso) para nuevamente tocar tierra sin novedad alguna.
A raíz de ello, en 1913 se constituye una Junta, con el objeto de recolectar fondos para la compra de un aeroplano destinado al Ejército. El 17 de abril de 1920 el entonces Presidente Provisional Victorino Márquez Bustillos, por decreto Nº 127, crea la Escuela de Aviación Militar, con el fin de entrenar los futuros pilotos del Ejército Nacional.
Esta institución se instaló el 10 de diciembre de 1920,
cuando un grupo de quince personalidades presidido por el coronel David
López Henríquez, y con la participación de asesores de la firma
francesa FARMAN, en un acto oficial declaran instalada la Escuela de
Aviación Militar Venezolana, la cual desde ese momento hasta el
presente, estaría ubicada en la ciudad de Maracay.
Al día siguiente, se inician los entrenamientos, produciéndose
solamente cuatro accidentes durante su primer año de funcionamiento.
El primer director de la Escuela de Aviación Militar fue el coronel
David López Henríquez. El Ejecutivo Nacional de esa época, preocupado
por la superación y tecnificación de las Fuerzas Armadas Nacionales,
contrata a la que parecía ser una de las más importantes potencias
militares y aéreas del período de post-guerra de la Primera Guerra
Mundial, Francia,
recibiendo no sólo personal de instructores y técnicos, sino también
material aeronáutico.
Es así, como las primeras aeronaves utilizadas son
los modelos Caudron G. III
(G-3), monomotores, en 1920, y posteriormente en 1922, los hidroaviones
G. IV (G-4), bimotores; estos últimos como dotación para la recién
creada Base Escuela de la Aviación Marítima de Punta Palmita.
A esta dotación, se le suman más adelante entre otras aeronaves, un
Curtiss, un Macchi de 110 HP y un Salmson italianos de 220 HP, y dos
hidroaviones Farman F-40 de 130 HP. Durante esta etapa inicial, la
aviación venezolana recibe el aporte y experiencia de tres misiones
aeronáuticas, la francesa (1921 a 1929), la alemana (1930 a 1933) y la
italiana (1938 a 1940) quienes traen los hidroaviones Junkers Bremen,
uno de los cuales, el "Bolívar" es utilizado para cumplir la primera
misión de navegación aérea internacional en el Raid
Maracay-Maracaibo-Santa Marta (Colombia), al conmemorarse el Centenario
de la muerte del Libertador Simón Bolívar (17 de diciembre de 1930).
Periodo de Modernización
En 1952, se adquieren los Jet De Havilland Vampire, con lo cual evoluciona de la antigua época de aviones a hélice, así como los North American F-86 Sabrejet y, en 1953, los Havilland Venoms. Posteriormente, los F-86K. En 1954, se adquieren los English Electric Canberra y, en 1971, se inicia la era supersónica con la dotación de los Mirage, los VF-5 y los T2D, estos últimos destinados al entrenamiento.
Entre el periodo de 1960
hasta la actualidad, la FAV comienza su proceso de desconcentración y
descentralización de sus medios operacionales. De esta manera, se
activan las Bases Aéreas Tte. Landaeta Gil en Barquisimeto (1964), Tte. Luis del Valle García en Barcelona (1965), Generalísimo Francisco de Miranda en Caracas (1966), General Rafael Urdaneta en Maracaibo (1971), Mayor Buenaventura Vivas Guerrero en Santo Domingo (1972), Tte. Manuel Ríos en El Sombrero (1973), Tcnel. Teófilo Luis Méndez en Puerto Ordaz (1979) y el General José Antonio Páez en Puerto Ayacucho (1980),
que sirven de soporte logístico-operacional a los sistemas de armas que
proporcionan la vigilancia aérea del espacio territorial y marítimo de
la República.
La Comandancia General de la Aviación ubicó su sede en la Base Aérea Generalísimo Francisco de Miranda, el 5 de diciembre de 1970, ubicación que tiene en la actualidad.
La capacidad logística y operativa se fortalece aún más, con la
aceptación del entrenador avanzado Rockwell T2-D Buckeye y la
incorporación para la aviación de enlace de los Sistemas Beechcraft C 90 King Air y Super King 200. Para apoyo a la Casa Militar de la Presidencia, se utilizan los Sistemas Boeing 737
y Gulfstream II. Para la demostración acrobática, la FAV adquiere el
Sistema Pitts como avión insignia de su Equipo Acrobático "Los
Halcones".
El innegable predominio de las tecnologías aplicadas y de la
electrónica sobre las demás ramas de la ciencia, han hecho posible
mediante la integración horizontal y vertical de las denominadas
tecnologías puntas, logros revolucionarios en el diseño, producción y
operación de ingenios aéreos, cuyas capacidades operativas son realmente
sorprendentes. Las aplicaciones abarcan no sólo la aviación militar de
combate, los sistemas de supervivencia y de apoyo, el armamento
aeronáutico y las plantas de poder, sino que son instrumentadas para
optimizar la aviación comercial, la aviación ejecutiva y la aviación
general.
Para atender las exigencias que este reto impone y mantenerse en
vanguardia en el concierto latinoamericano, la Fuerza Aérea Venezolana
incorporó en 1983, el versátil cazabombardero polivalente Lockheed Martin F-16 Fighting Falcon, de la General Dynamics,
capaz de realizar misiónes de defensa aérea, y ataque objetivos de
superficie, bien sea diurno o nocturno y aún en condiciones
meteorológicas adversas. Modernizó los sistemas de caza de ataque VF-5 y
Mirage 50 y adquirió los aviones Cisternas Boeing 707. Para reforzar su flota de helicópteros, adquiere los sistemas Bell 214 y Bell 412, así como también el sistema francés Super Puma. Para el transporte mediano opera el sistema Aeritalia G-222 y para el transporte ejecutivo se procuran los sistemas Dassault Falcon 20 y Gulfstream III.
En 1987, se compran a Brasil los Tucanos T-27. En 1989,
se reciben los helicópteros Super Pumas, para el Grupo Aéreo de
Operaciones Especiales. Igualmente, se inicia la repotenciación del
sistema Mirage III/5 original a la nueva versión Mirage 50.